Herrera Casado habla de un viajero al que preguntado donde dejó su corazón un día, afirma categóricamente que en Carabias. En su texto reconoce que se trata de “una especie de fin del mundo frío y solitario, brillante y húmedo…” parece describir la Antártida o el Polo Norte y el encuestado un turista esquimal procedente de Adelaide o Hammerfest que estaría, lógicamente, en su propio elemento.
Yo fui a Carabias en Abril 2010 y casi como Julio Cesar.. veni, vidi, vici…he llegado, he visto… y cambié la “vici” por mi coche saliendo despavorido después de hacer cuatro fotos mal hechas de las cuales adjunto algún ejemplar por si la amable hospitalidad de PT las acepta… que eso si será bondad….!!!
Texto y fotografías: Antonio Matamoros