Iglesia de San Pedro de Villanueva.
Ya en el año 746 (Siglo VIII) en el reinado de Alfonso I de Asturias, durante los años 739 a 757, sucesor de su cuñado el rey Favila, existían referencias documentadas de esta iglesia, sin embargo ningún vestigio de la mismo se conserva. El edificio que vemos perteneció a un monasterio benedictino de principios del siglo XIII y hoy forma parte de las dependencias del Parador de Turismo.
La construcción primitiva se debe, según la leyenda, al deseo de la reina Hermesinda, esposa de Alfonso I de construir una iglesia en recuerdo de su hermano Favila (hijos ambos de D. Pelayo) muerto por un oso, yendo de cacería.
De esta historia dan fe tres capiteles, la despedida de Favila con un beso a la reina y esposa Froiluba, el rey a caballo con su halcón, en el segundo vemos, como en un flash back, otra escena entre ambos, cariñosa, parece que en palacio, al otro lado del mismo capitel, por cierto incompleto, roto, vemos la trágica muerte de Favila a manos de una rara fiera, que según la imaginación del cantero artífice se trataría de un oso. El tercer capitel muestra, casi en el canto, a Froiluba en jarras y mohín de enfado, mientras Favila se aleja tan pancho.
Debía ser algo jaranero porque en la crónica de su reinado se dice que “no hizo nada de mención para pasar a la historia” en su corto reinado de poco más de dos años y medio, en aquellos tiempos los accidentes de caza, despeñarse tontamente o tomar una "sidrina" envenenada estaban a la orden del día por lo que el escalafón de los monarcas se movía con una cierta celeridad.
Fotografías de Begoña, Nieves y Antonio Matamoros
Texto de Antonio Matamoros