Seguimos entre bosques de robles, ya pisando nieve y ganando altura y viendo cada vez mas lejos el Monasterio del Paular, que aparece y desaparece entre el arbolado.
Una cruz en recuerdo de cabreros y pastores de la zona nos avisa de la proximidad de la ermita.
Y ya llegamos a la ermita de Santa Ana, enclavada en un magnífico paraje dominando el valle. Se trata de una edificación del siglo XVII en la que sobrevive un ábside semicircular, presumiblemente románico. Ahora se están efectuando unos trabajos de mantenimiento en el templo. Este guarda en su interior una imagen de Santa Ana, románica, datada sobre los siglos XI-XII.
Vista del ábside desde levante. Al fondo, los montes carpetanos. Atardece...queda desandar camino...
1 comentario:
Señor Paco Torralba ,el otro dia tambien me hice uana excursion por la sierra,pero por el lado segoviano,rrecorriendo un poco la cañada real soriana,da gusto andar por esos lugares y pisar la nieve, oir esos arroyos de plata precipitarse ladera abajo en esa soledad y despues encontrarte en mitad de la nada alguna ermita que otra,restos de un pasado floreciente y ahora tan abandonado todo,un saludo y feliz camino ,Esca
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