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ROMANICO Y COPLAS




El pusilánime mejor se queda en casa…!
 Regresando de Butrera, muy cerca de Villarcayo, cruzado el río Trema, reparo en una construcción a primera vista románica…. freno, aparco pegadito a un muro de piedra y a la señal de tráfico que me indica estar en Torme. Cerca, una mínima represa del río y dos pencos a la intemperie dialogando sobre la aburrida vida que les toca vivir. Día frío y lluvioso, calabobos continuo que dura ya hace tres, visita a las Merindades pasada por agua, mediados de Mayo 2012. Iglesia pegada a otro edificio, hago media docena de fotos, me enfango hasta las cejas y desisto continuar. Retrocedo, cambio de calzado bajo la persistente llovizna y la mirada crítica de Conchita, mi acompañante ángel guardián, que decidió con buen tino quedarse a cubierto. Repasando hoy el archivo me topo con esas míseras fotografías, testigos de una visita frustrada e indago en Internet, entro en www.torme.es, lugar que habla de gente que se resiste a que lo suyo se pierda en el abandono. Transcribo una copla que allí aparece, no se si vieja o nueva, de Juanillo Soplillo, visitante sempiterno en la “sanjuanada” de Torme. 

“Viniendo del medioevo, aquí estoy de nuevo,
 Y por echar lo malo al fuego, yo me la juego.
 Bailaremos y reiremos 
Porque dentro de un año ¿ donde estaremos ?”

 Creo que esa iglesia es la de San Martín y contiene más de lo que mis pobres fotografías puedan dejar entrever, si los hados son propicios volveré algún día…..pero… son tantos los sitios a los que me prometí volver que ya va pareciendo quimera, ilusiones vanas que parecen posibles, pero que no lo son.  

Fotografías y texto: Antonio Matamoros

3 comentarios:

Nieves dijo...

La vida es una tragedia griega en la cual, nuestro destino está guiado por una fuerza superior, no solo a los hombres, sino incluso a los mismos dioses. Los hados tienen ese poder sobrenatural inevitable e ineludible que, según se cree, guía la vida humana hacia un fin que no siempre es el deseado y que habitualmente roza la fatalidad.
Pero el destino, los hados, nuestro sino, es pura metafísica y como tal, está sometida a interpretaciones. Y puestos a interpretar yo interpreto, ya que soy espíritu de contradicción, que los hados son un coñazo y que nuestro destino, las más de las veces, está en nuestras humildes manos. Nosotros diseñamos nuestro futuro con las acciones (o "no acciones")presentes, igual que las acciones presentes derivan de las pasadas. Teniendo esto en cuenta... que le den a los hados!. Si son propicios volverás y si no lo son, sigue luchando cada día para que tus acciones presentes te puedan llevar, más pronto que tarde, a un futuro en el que vuelvas a cruzar el río Trema y, si hace falta, ya aparcaré yo junto a esa señal de tráfico que nos indique estar, por fin, en Torme.

Ah! Por cierto! Las fotografías, de miseras, nada. Ese músico está tocando en vivo. ¿No escucháis su dulce melodía?

Paco Torralba dijo...

Pues... bienvenida la acción en detrimento de los hados, Nieves...
Por cierto, ¿quien ha dicho que las fotos son míseras???
Yo también oigo la melodía¡¡¡

A.Matamoros dijo...

Amigos, la vida es una sucesión de imprevistos que te van ocurriendo día a dia mientras tu te empeñas en hacer otros planes.

Al hablar de "miseras fotografías"
me refería realmente a la pírrica cosecha, al mínimo número de ellas.

Debió ser esa melodía de que hablais la que me hizo parar al ladito de la señal de Torme, no digo que no.
AM