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EL VIAJE PROMETIDO (2)


 Fotografía de Antonio Matamoros


 Fotografías de Nieves y Begoña Matamoros


 Fotografía de Antonio Matamoros


 Fotografía de Antonio Matamoros


 Fotografía de Begoña Matamoros


 Fotografía de Nieves Matamoros


Fotografías de Antonio Matamoros

Insistimos en las maravillas que podemos ver en Santa Mª la Real de Nájera aunque nada quede de la primitiva construcción mozárabe  y románica ya que la actual data de 1.422. Pero como excepción magnífica podemos admirar la lauda o tapa del sepulcro, desaparecido, en estilo puramente románico utilizado para el enterramiento de Doña Blanca de Navarra. En la entrega anterior se puede ver una mínima parte de sus figuras a raíz de un comentario sobre las puertas en la escultura románica. Añado ahora una vista también parcial de la misma y otra de su situación en Santa Mª.  Para entrar en el claustro de Los Caballeros, siglo XVI, existe una puerta de hierro a juego con las bóvedas y arcos de la construcción, pido licencia para presentar su cerrojo, no románico, pero diría que escueto y sobrio entre tanto fino y delicado plateresco.

Por seguir el guión iniciado en El Viaje Prometido (1) ved unas imágenes de San Miguel de Cornezuelo. Templo rústico y algo tosco de fácil llegada y envuelto de un casi bosque que le hace acogedor. Interesante la fuente que mana a un nivel más bajo que la iglesia y poco más a menos a la altura del presbiterio de la misma y cuya acequia transcurre a lo largo de todo el muro exterior.
Texto: Antonio Matamoros

5 comentarios:

A,Matamoros dijo...

Paco, me preguntaba como conseguirías meter las nueve fotografías y lo has logrado nuevamente, eso representa dedicarle un tiempo, caro tiempo. No sabes cuanto te lo agradezco.
Saludos a todos.
AM

A,Matamoros dijo...

Paco, me preguntaba como conseguirías meter las nueve fotografías y lo has logrado nuevamente, eso representa dedicarle un tiempo, caro tiempo. No sabes cuanto te lo agradezco.
Saludos a todos.
AM

Anónimo dijo...

Perdonad, tengo un dedo de repetición como los Mauser de la antigua mili.
AM

Paco Torralba dijo...

Pero... si es que mandas un material que da gusto "trastear" con él.
Pasar de la delicada lauda o del delicadísimo encaje que se aprecia en el claustro de Sta María al elemental y rústico cerrojo en un mismo reportaje es una notable paradoja.
Y que decir de esos personajes del capitel y tímpano de San Miguel de Cornezuelo. Esa mezcla de ingenuidad y rudeza que es uno de los máximos atractivos del románico. Impagable ese hombre atacado(y atacando) a un león. En esa lucha llevan 8 siglos...
Y ese árbol??? con esa imperfecta simetría¡¡¡ rodeado además de una enigmática decoración.
Fantásticas fotos, Antonio. Un lujo...

A,Matamoros dijo...

Muy de acuerdo en todo. Insistiría en la palabra ingenuidad, tanto las figuras del capitel como la fiera atacante/atacada e incluso en una ventana existente en el ábside donde aparecen cuatro fierecillas repartidas de a dos en sendos capiteles (fotografía que no llegué a enviar por aquello de no abusar) reflejan un ambiguo conocimiento por parte del autor de la figura real de un león. En todas ellas diría que en sus caras no hay fiereza incluso en la que claramente ataca y se defiende del hombre. El artífice les da un aspecto, diría que hasta simpático, más parecen gatos grandes, que eso si vería en las aldeas, supongo que tendrían gatos por aquel entonces. Además el autor se esfuerza en el detalle de cola y lo que puede ser melena con una filigrana parecida a trenza. El cruzado del apéndice entre las patas traseras puede ser una treta para aprovechar el espacio disponible ya que el tímpano toca a su fin en ese lado. Pensar en que ofrece con ese gesto acatamiento o sumisión al mismo tiempo que le pega dentellada no parece.
Cuando querían reflejaban en sus obras seres maléficos, rostros iracundos, maldad suprema, es decir cuando tocaba el mal quedaba reflejado con imágenes que podían ocasionar pavor, no parece ser este el caso en San Miguel donde el artífice se recreaba en una figura casi bonachona de la fiera y se esforzaba en la labra de la cola casi con un detalle de filigrana.
Que poco sabemos de aquellas gentes !.
AM